Guía de audioTeatro Tivoli
Teatro clásico de los años 20 con espectáculos de ballet, cine, jazz, ópera, obras teatrales y actuaciones de orquestas.
Adéntrate en el corazón de Lisboa y descubre el Teatro Tivoli BBVA, un deslumbrante ícono cultural que ha fascinado a la ciudad durante casi un siglo. Ubicado en la majestuosa Avenida da Liberdade, este tesoro neoclásico recibe a sus visitantes con una fachada de piedra tallada, líneas elegantes y una distinguida cúpula de tejas oscuras. El emblema del teatro, un ramo de cuatro rosas, rinde tributo a las cuatro hijas de su fundador, Frederico de Lima Mayer. Esta delicadeza deja entrever la historia personal detrás de su creación.
A principios de los años veinte, el cine mudo causaba furor en toda Europa. Frederico de Lima Mayer, un empresario apasionado y amante de las artes, soñaba con regalarle a Lisboa una sala que estuviera a la altura del glamour europeo. Para ello, confió el proyecto al reconocido arquitecto Raúl Lino, quien imaginó un edificio en el que la elegancia se mezcla con la intimidad. Cuando el Tivoli abrió sus puertas a finales de mil novecientos veinticuatro, el vestíbulo se llenó de invitados vestidos de gala para la proyección de “Violetas Imperiais”. Aquella noche, la música en vivo envolvía el ambiente. Desde sus inicios, el Tivoli fue más que un cine. Se transformó en escenario de teatro contemporáneo, ballet y conciertos sinfónicos.
Rápidamente, el Tivoli se convirtió en punto de encuentro de la alta sociedad lisboeta. Animaba tardes de té en su suntuoso salón y noches de bailes de máscaras y estrenos legendarios. Aquí resonó por primera vez el sonido en las películas durante los primeros años treinta. Más tarde, su pantalla acogió clásicos inolvidables como “Doctor Zhivago”. Por el escenario, bajo cortinas de terciopelo, pasaron figuras míticas de la música y las artes escénicas, como Igor Stravinsky o Yehudi Menuhin.
Con el paso de las décadas, la propiedad del teatro cambió varias veces de manos. Cuando el edificio estuvo en peligro, el compromiso de sus seguidores y la llegada de nuevos socios lo rescataron. En los últimos años, la compañía portuguesa UAU y el respaldo internacional de BBVA han hecho posible que el Tivoli vuelva a florecer. Se restauraron con esmero los suelos originales de madera y los balcones decorados con frescos. Al mismo tiempo, se implementó tecnología escénica moderna. Esta fusión de tradición y vanguardia permite que cada función—sea ballet, jazz u ópera—tenga una vitalidad y un encanto que trascienden el tiempo.
Con un aforo aproximado de mil cien personas, el Tivoli sigue siendo un punto de encuentro cultural donde se presentan artistas nacionales e internacionales, estrenos de gala y eventos innovadores. Al celebrar su centenario con una temporada repleta de espectáculos y proyectos destacados, el Teatro Tivoli BBVA permanece como un símbolo brillante de la creatividad, la elegancia y la hospitalidad que definen el espíritu de Lisboa.